La madera y la música | Unidas por naturaleza
La madera y la música casan bien. Van de la mano en instrumentos de viento, de percusión y de cuerda; en tocadiscos, altavoces y en auditorios. La Sala Pelícano, una sala de conciertos de La Coruña, cuenta con panelados de madera no solo por su fuerza estética sino también, por cómo conectan de manera natural con la música.
Propiedades acústicas
La madera actúa como atenuante de la reverberación, es decir, reduce los ecos y aumenta la claridad del sonido. La composición de la madera permite absorber el sonido y reducir, por tanto, el tiempo que dura la reverberación. En auditorios, teatros y salas de conciertos de gran tamaño como esta, es fundamental que el sonido sea nítido en cualquier punto. Por ello, el proyecto, de Marcos Samaniego, envuelve todo el recinto en madera y logra una acústica de gran calidad.
El diseño
El espacio combina tonos ceniza y naturales con una imponente balconada en eucalipto ahumado que asoma sobre la pista de baile. El eucalipto es una especie local con infinitas posibilidades. Se puede tintar, termotratar y como en este caso, ahumar, con lo que adquiere unos matices oscuros muy sofisticados. El paramento del guardarropa está panelado en un fresno olivato ligeramente ahumado que intensifica su tono natural tostado y cálido. Por último, la zona del bar y el resto de paredes de la sala estás recubiertas con un tulipié gris neutro que pone la guinda al proyecto de interiorismo.
La música baila al ritmo de la madera en este proyecto de ocio nocturno que respira naturaleza y elegancia.